Makei dijo en la ONU que las ciudades belarusas son las más seguras del mundo; los estudiantes fortalecen su asociación; Lukashenka y Putin se reunieron y se llamaron
23 febrero 2021 | Voice of Belarus
En vez del Día del Defensor de la Patria, Día de los Héroes del Cambio
El 23 de febrero, Belarús oficialmente celebra el Día del Defensor de la Patria. Es el legado de la época soviética que en esta fecha celebraba el Día del Ejército y de la Marina soviéticos. Tradicionalmente se felicitaba a los militares, así como según la «tradición popular» a todos los hombres en general. De hecho, esta es una de las fiestas de género que se celebran en el espacio postsoviético. Mucha gente antes no tomaba bien la tradición de felicitar además a los que no tenían nada que ver con el servicio militar. Pero después de las torturas y atrocidades en las que están involucradas las personas en uniforme, muchos se encontraron ante una elección moral para festejar este día.
Sviatlana Tsikhanouskaya llamó a los belarusos a festejar el 23 de febrero no como el Día del Defensor de la Patria, sino como el Día de los Héroes del Cambio. «¡Que el 23 de febrero sea su fiesta! Traedles flores, firmad una postal, preparad un regalo, invitadles a una taza de café, reuniros con ellos en casa. Llamen a los quien no van a ver. Que este día sea una fiesta verdadera y no impuesta. Recuerden: eso es la fiesta de cada uno quien acabó en la cárcel por su credo político», dijo Tsikhanouskaya.
El canciller Makei habló en la ONU: las ciudades belarusas son unas de las más seguras del mundo
El Ministro de Relaciones Exteriores de Belarús Uladzimir Makei habló en la 46ª Asamblea General de la ONU y calificó los acontecimientos alrededor de su país como un intento fallido de imponer una «revolución de colores». Los puntos principales de su discurso:
«Podemos declarar con orgullo que las ciudades belarusas sonunas de las más seguras ciudades en el mundo, que todos los ciudadanos de nuestro país tienen garantizada la posibilidad de empleo, tienen derecho a la pensión, la educación gratuita y uno de los sistemas más asequibles y eficientes en el mundo de la medicina gratuíta», dijo Makei.
«Los derechos humanos son un pretexto favorito de las así llamadas democracias maduras para hacer acusaciones arbitrarias contra aquellos estados que cumplen con sus obligaciones en la materia de derechos humanos siguiendo estrictamente los tratados internacionales, no sus interpretaciones sesgadas».
«Las instituciones internacionales no tienen ningún motivo para prestar atención exclusiva a Belarús en el tema de los derechos humanos, excepto para ejercer presión política sobre el gobierno legítimo».
«Algunos no pueden hacerse con la idea de que, a pesar de la dura presión económica y política, el estado belaruso no se está desarrollando de acuerdo con los patrones de los países occidentales, sino de la forma que decide el pueblo belaruso. Por esta posición independiente, Belarús se convirtió en blanco de un brutal ataque desde el exterior».
«Para derrocar al actual gobierno, se utilizaron todo tipo de mecanismos para desestabilizar la situación interna: desde las noticias falsas y la financiación de protestas supuestamente “espontáneas” hasta sanciones políticas y económicas, pero Belarús resistió».
«La Asamblea Popular de Belarús ha confirmado de manera convincente el apoyo a la política de estado por la mayoría de la población».
Lukashenka y Putin fueron a esquiar a Sochi y luego volvieron a llamarse
El 22 de febrero de 2021 se celebró la reunión de Aliaksandr Lukashenka y Vladimir Putin. Hasta el momento, no hay información específica sobre los principales temas de la conversación y las decisiones tomadas. Los expertos piensan que Belarús hoy se encuentra aislada y solo Rusia la apoya. En este sentido, Lukashenka volvió a pedirle apoyo financiero a Putin. Para mantenerse en el poder, Lukashenka está dispuesto a hacer muchas cosas, incluso realizar una integración aún más profunda con Rusia. Él declaró que casi todas las «hojas de ruta» en diversas áreas de cooperación entre Moscú y Minsk están listas para su firma. Según la información privilegiada, Lukashenka incluso está dispuesto a vender varias empresas belarusas a compañías rusas.
Hoy, 23 de febrero, Putin y Lukashenka han mantenido una conversación telefónica, durante la cual, según la información oficial, han discutido temas de cooperación belaruso-rusa, en particular, el funcionamiento del sistema tributario, la cooperación en el complejo militar industrial, así como el fortalecimiento de los sistemas de defensa conjunta.
Los estudiantes de 15 universidades belarusos han fortalecido la Asociación de Estudiantes Belarusos
Los representantes de 15 comunidades de estudiantes de las universidades belarusas se han unido a la Asociación de Estudiantes Belarusos (BSA). De hecho, esta es una renovación de una organización ya existente, solo que ahora no incluye a activistas individuales, sino los comités de huelga que representan los intereses de sus universidades. Los estudiantes seleccionan a sus representantes para la asociación.
La asociación apoya las demandas de la protesta nacional: poner fin a la violencia, liberar a todos los presos políticos, cancelar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 y la dimisión de Lukashenka. Los estudiantes formarán órganos de autogobierno estudiantil, lucharán contra la distribución forzada de estudiantes al trabajo y defenderán la creación de condiciones justas para los estudiantes en la nueva Belarús. Hoy la asociación se dedica a recopilar fianzas por los estudiantes presos y presta apoyo jurídico a los estudiantes. BSA es miembro de pleno derecho de ESU que une todas las asociaciones y uniones estudiantiles de Europa. La Asociación mantiene estadísticas en inglés sobre los casos de represalias contra los estudiantes y también elabora informes alternativos para el Proceso de Bolonia, el Parlamento Europeo, la OSCE y la ONU sobre violaciones de derechos humanos en la comunidad académica.
En los años 1988–1989 varias asociaciones informales de estudiantes de Belarús, unidas por la idea nacional belarusa, decidieron formar una sola unión. En 1992, BSA fue registrada oficialmente por el Ministerio de Justicia de Belarús. Con la llegada de Lukashenka comienza una persecución constante de organizaciones independientes, incluida la BSA. En 2001 la BSA se convierte en la primera víctima importante de la decisión inconstitucional de la Corte Suprema sobre la liquidación de la organización. Desde 2006 la BSA casi completamente funciona de manera clandestina, participando en proyectos culturales y de educación informales.