Personas desconocidas amenazan a la presidenta del comité de huelga de Grodnopromstroy

Ha acudido a la policía

24 agosto 2020, 18:15 | TUT.BY, Hrodna life
Yulia Slivko
Yulia Slivko
Source: Katerina Gordeeva, TUT.BY

La presidenta del comité de huelga de los empleados de la empresa Grodnopromstroy de la ciudad de Grodno, la estucadora Yulia Slivko comunica que está recibiendo amenazas por teléfono y en las redes sociales. Yulia está criando a su hijo sola. Unas personas desconocidas supuestamente le dijeron a la mujer: «Si no te callas, ten en cuenta que tu hijo pasea por la calle. Nunca se sabe lo que puede volar sobre su cabeza». Después de eso, Yulia se llevó a su hijo de la ciudad. Ella no sabe si es seguro traerlo de vuelta al comienzo del año escolar. La ciudadana de Grodno ya ha acudido a la policía con motivo de estas amenazas, informa hrodna.life.

El comité de huelga en Grodnopromstroy fue creado después de las detenciones masivas del 9 al 11 de agosto. «Estábamos impactados con que la gente fuera golpeada en las calles, que no nos permitieran expresar nuestra propia opinión en las elecciones. Decidimos ponernos en huelga. Me eligieron presidenta del comité de huelga» – dice Yulia.

La idea de la huelga fue apoyada por unos 500 de los 3.700 trabajadores de Grodnopromstroy. Luego comenzaron a persuadirlos de que no se pusieran en huelga y sintieron presión por parte de la administración. El argumento principal era: «Primero queréis poneros en huelga y luego os quejais de que los salarios son bajos». Actualmente no hay más de cien activistas.

 «El comité de huelga ha propuesto realizar una votación secreta. Quién esté en contra podrá escribir que está en contra. Estaríamos de acuerdo con la mayoría. Pero la gente está bajo presión. Tienen miedo de quedarse sin trabajo y sin salario. Ni siquiera quieren votar» – dice Yulia sobre la situación en la empresa. «La mayoría de los partidarios de la huelga han sido trasladados a trabajar en la construcción de un nuevo dispensario oncológico. Ha sido asignado un delegado normalizador a esta brigada, que está encargado de controlar si los trabajadores cumplen con sus tasas de producción todos los días. Anteriormente, no existía tal práctica en la empresa. El 21 de agosto les trajeron una carta manuscrita sin firmas. Al parecer, de los médicos que pedían construir este centro y no ponerse en huelga porque necesitaban un hospital».

Y Yulia empezó a recibir llamadas amenazantes.

«Me llamaron desde un número oculto y me dijeron: «Si no te callas, ten en cuenta que tu hijo pasea por la calle. Nunca se sabe que puede volar sobre su cabeza», dice la mujer.

Después de eso, se llevó a su hijo de la ciudad. No sabe si es seguro traerlo de regreso al comienzo del año escolar.

El 20 de agosto, Yulia volvió a recibir llamadas. Esta vez, la persona que llamó se presentó como un trabajador social. No se presentó, pero preguntó dónde se encontraba el hijo de Yulia. Además, según la mujer, la advirtieron de que su hijo podría estar registrado como en una posición socialmente peligrosa.

En la escuela donde estudia el niño dicen que no hay razón para esto. Yulia y su hijo viven en una residencia familiar, el niño tiene todo lo que necesita para la vida y el estudio.

El mismo día, Yulia recibió nuevamente una llamada de personas desconocidas. Esta vez, fue invitada a una conversación al departamento de asuntos internos del distrito sobre la participación en eventos masivos no autorizados, pero la persona que llamó no especificó exactamente a dónde acudir. Yulia pidió una citación.

«Me respondieron – Si no quieres por las buenas, podemos hacerlo de otra manera», dice Yulia.

«Si se comete una infracción administrativa, la citación se entrega contra firma», ha comentado la información el secretario de prensa de la Dirección de Asuntos Internos de la región de Grodno, Yevgeniy Dudko. Según él, si hubiera llamado un policía, se habría presentado y «es poco probable que hubiese hablado en tono amenazador».

El 22 de agosto en los mensajes de varios canales de Telegram apareció información que desacreditaba a la mujer, así como la información de que pagó dinero a los trabajadores por participar en las huelgas. Allí también se publicaron los números de teléfono de Slivko y su hijo.

Yulia Slivko escribió un comunicado al departamento de asuntos internos del distrito Oktiabrskiy de Grodno sobre las amenazas recibidas, así como sobre los hechos de difusión de información falsa y difamatoria y de sus datos personales.