11 agosto 2020 18:40 | European Counsil
El 9 de agosto se realizaron elecciones presidenciales en la República de Belarús.
La UE ha seguido de cerca los acontecimientos anteriores a las elecciones presidenciales. Durante la campaña electoral, el pueblo de Belarús ha demostrado el deseo de un cambio democrático.
Sin embargo, las elecciones no fueron ni libres ni justas.
Las autoridades estatales desplegaron una violencia desproporcionada e inaceptable que causó al menos una muerte y muchos heridos. Miles de personas fueron detenidas y se intensificó la represión de las libertades de reunión, de los medios de comunicación y de expresión. Pedimos a las autoridades de Belarús que pongan en libertad de inmediato y sin condiciones a todos los detenidos. Además, los informes fidedignos de los observadores nacionales muestran que el proceso electoral no cumplió con las normas internacionales que se esperan de un Estado participante de la OSCE.
El pueblo de Belarús merece algo mejor.
Desde la liberación de los presos políticos en 2015, la relación entre la UE y Belarús ha mejorado pero si no se avanza en materia de derechos humanos y estado de derecho, esta relación sólo puede empeorar.
En este contexto, evaluaremos las medidas adoptadas por las autoridades bielorrusas para hacer frente a la situación actual y llevaremos a cabo un exámen a fondo de las relaciones de la UE con Belarús. Esto puede incluir, entre otras cosas, la adopción de medidas contra los responsables de la violencia observada, las detenciones injustificadas y la falsificación de los resultados de las elecciones.
Pedimos al gobierno de Belarús que inicie un diálogo genuino e inclusivo con la sociedad en general para evitar nuevos actos de violencia. La UE seguirá apoyando la democracia, independencia, soberanía, prosperidad y estabilidad en Belarús.