26 jubiladas detenidas por leer literatura belarusa en un tren de cercanías; el cónsul honorífico de Belarús en Italia ha dejado su cargo por principios; más de 40 mil personas han firmado una petición a Yara
27 febrero 2021 | Voice of Belarus
Unas jubiladas fueron emboscadas y arrestadas por leer libros en belaruso: «es literatura disidente»
El viernes se hizo una encerrona en varias estaciones de tren a unas jubiladas que viajaban en el tren de cercanías en dirección a la ciudad de Maladzechna. Las ancianas fueron detenidas y registradas por agentes de paisano. Las mujeres iban leyendo libros de escritores belarusos en el tren. Se trataba de una acción de apoyo al idioma belaruso.
En total, según la información disponible, fueron detenidas 26 personas de entre 60 y 75 años de edad.
Hoy, después de una noche en la prisión de la calle Akrestsina, fueron liberadas. La mayoría de los juicios están programados para el lunes, 1 de marzo. Las mujeres dicen que había 14 personas en una celda de seis camas y no les dieron colchones para pasar la noche.
Según las pensionistas, los policías las grabaron en video, y además dejaron claro que entre ellos se había introducido un cabeza de turco.
Entre las detenidas estaba Natalia, de 75 años. Su juicio tuvo lugar de inmediato. Fue multada en virtud del artículo 23.34 del Código de Infracciones Administrativas con 25 unidades básicas (aproximadamente 280 dólares americanos) y puesta en libertad. En la corte, la mujer dijo que no viajaba en ese tren, no participó en la acción y regresaba de su casa en las afueras de la ciudad donde vivía. Durante el cacheo en su bolso encontraron semillas de plantas y libros en belaruso. Un oficial de policía le dijo que los libros de escritores belarusos son literatura disidente.
Como referencia, las obras de los escritores belarusos cuyos libros se encontraron en las jubiladas se incluyen en el plan de estudios escolar oficial de literatura belarusa, y el belaruso es una de las dos lenguas oficiales del estado. Las detenciones de estas jubiladas son otra prueba del absurdo y el caos institucional que se está produciendo en Belarús.
Dimite el cónsul honorífico de Belarús en Italia
El Cónsul honorífico de Belarús en la región italiana de Emilia-Romaña, Antonio Sottile, ha dimitido debido a la represión contra el pueblo belaruso, escribe el periódico italiano Gazzetta di Reggio.
«Mi elección es la elección de mi conciencia, porque creo firmemente en los valores que me inculcaron mis padres y que transmito a mis tres hijos: democracia, libertad, respeto a los derechos humanos y no violencia. En Belarús, más de 27 mil personas han sido arrestadas y sometidas a intimidación, persecución y tortura. Decenas de personas han desaparecido, cinco han muerto defendiendo sus derechos».
Según dice, formó su postura teniendo en cuenta que «la OSCE confirma que las elecciones del 9 de agosto no cumplieron con los estándares internacionales y no fueron libres ni justas. Europa no reconoce los resultados de estas elecciones. El Parlamento Europeo no ha reconocido a Lukashenka como presidente y pide nuevas elecciones bajo control internacional».
Los cónsules honoríficos son personas que ayudan a establecer lazos económicos y culturales entre los países, pero al mismo tiempo no son funcionarios y no perciben un salario. Sottile llevaba siendo cónsul honorífico de Belarús en la región desde noviembre de 2011, participó en la rehabilitación de niños de la zona de la catástrofe de Chernobyl, establecía relaciones entre empresas belarusas e italianas.
Andrei Sannikov instó en su página en Facebook a hacer un llamamiento a otros cónsules honoríficos de Belarús en otros países para que sigan el ejemplo del Sr. Sottile. Andrei Sannikov fue uno de los oponentes de Lukashenka en las elecciones presidenciales de 2010. Él y su familia fueron perseguidos y ahora están exiliados.
Más de 40 mil personas firmaron un llamamiento a la empresa noruega Yara
Más de 40 mil personas han firmado una petición dirigida a la empresa noruega Yara llamándola a poner fin a su cooperación con Belaruskali.
Los autores de la petición consideran que la empresa belarusa de extracción de fertilizantes potásicos está bajo el control total del régimen ilegal de Lukashenka.
«Belaruskali es una de las principales fuentes de financiación para el OMON y el KGB de Lukashenka, que son responsables de la privación de libertad, violaciones, torturas y persecuciones de decenas de miles de personas», enuncia la petición.
En septiembre, la delegación de Yara visitó la empresa y condenó la violación de los derechos humanos y los derechos de los trabajadores en Belarús. Los noruegos calificaron la situación en Belarús de inaceptable.
Al mismo tiempo, los contratos no se rescindieron y la dirección oficial de Belaruskali aseguró a Yara que se respetaban los derechos de los trabajadores.
La petición dice que los intentos de Yara de influir en el liderazgo de Belaruskali para detener la violación de los derechos de los trabajadores y la persecución de los huelguistas no darán resultado.
Se señaló que, a pesar del comunicado oficial de la dirección de la empresa belarusa, las represiones continúan.
El lunes, 1 de marzo, está programada una reunión por vídeo entre la diáspora belarusa y la dirección de Yara.
En varios países tuvieron lugar piquetes para que no se firmara el contrato entre Yara y Belaruskali.
Source: youtube.com/beldomua
En Belarús se siguen dando días de cárcel a las personas por razones inverosímiles
Source: Viasna Human Rights Centre
La residente de 45 años de la ciudad de Biaroza, Valiantsina Miadviedz, fue condenada a dos años de arresto domiciliario por llamar en un canal de Telegram al jefe de la Inspección de asuntos de menores, Dzmitry Lishko, «un tipo podrido y resbaladizo», comparándolo con un policía nazi. Un examen lingüístico del 7 de diciembre de 2020 reveló una forma anormal de la expresión que tiene como objetivo ofender a un oficial de policía y es un insulto público a un funcionario del gobierno en el desempeño de sus funciones oficiales.
Dos vecinos de Minsk, Dzianis Zayancheuski y Maksim Tatsianok, han sido condenados a tres años de privación de libertad en régimen abierto por unos espantapájaros con fotografías de la Presidenta del Consejo de la República, Natallia Kachanava, el jefe del Ministerio del Interior, Ivan Kubrakou, y un oficial de policía con un pasamontañas sobre el fondo de la bandera blanca, roja y blanca. El tribunal consideró que los hombres manifestaron su desdén por la sociedad, humillaron deliberadamente y con particular cinismo el honor y la dignidad de los funcionarios.
El tribunal de distrito de la ciudad de Vitsebsk condenó Yulia Kashaverava a un año y medio de prisión en una colonia de régimen ordinario por tres patadas a un minibús de la policía. El fiscal pedía seis años de prisión para la joven.
En el juicio, la muchacha dijo que quería brindar asistencia médica un chico que había sido detenido por la policía antidisturbios; estaba escapando de las fuerzas de seguridad y cayó al suelo. Pero los agentes de seguridad rociaron gas lacrimógeno y aparcaron un coche de la policía cerca, por lo que Yulia, según cuenta, no pudo resistirse y dio tres golpes con el pie a la puerta trasera del coche de los agentes de seguridad. Pero aseguró que no golpeó las puertas del lado derecho y no le arrancó la máscara y la gorra a ningún policía.
Yulia Kashaverova había trabajado como enfermera en la 103ª Brigada de Desembarco Aéreo. Fue despedida de allí el 9 de octubre, después de ser detenida en una protesta y multada en virtud del art. 23.34 del Código de Infracciones Administrativas. En 2020, antes de su arresto, murió su madre.
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