Protestan contra el arresto de sus compañeros
29 septiembre 2020, 14:35 | Radio Liberty
Estudiamos cómo protesta esta gran empresa química de Grodna.
Unos 70 trabajadores de «Grodna Azot» han escrito sus cartas de dimisión, pero todavía no las han entregado a la dirección. Así han reaccionado al arresto de su compañero y a los juicios que comenzarán próximamente. Si los despiden, se detendrán, como mínimo, dos talleres.
¿Qué ha impulsado la protesta?
Durante la protesta el día de la inauguración de Aliaksandr Lukashenka, el 23 septiembre, fueron detenidos varios trabajadores de «Grodna Azot». A uno de ellos, Ígar Rubtsévich, le dieron 5 días de arresto porque no era la primera vez que lo detenían. Ese fue el primer caso de arresto por participar en las protestas del gigante químico. Rubtsévich fue puesto en libertad el 28 septiembre.
«Diecisiete compañeros lo recibieron como a un héroe», dice el líder del comité de huelga de «Grodna Azot» Yury Ravavy, que ahora se encuentra en Varsovia.
Antes de eso, el 25 agosto, un grupo de trabajadores de la empresa fue detenido cuando se dirigía desde el trabajo hacia el centro de la ciudad. Eran unas 30 personas, que fueron retenidas en comisaría durante varias horas. Cerca de medio millar de residentes de Grodna acudieron a apoyarlos, igual que la dirección de Azot. Todos ellos fueron liberados esa noche, pero fueron acusados de participar en un acto masivo no autorizado. Sus juicios están previstos para el 30 septiembre.
Cartas de dimisión, negaciones a trabajar, huelga italiana
En respuesta, los trabajadores de «Grodna Azot» empezaron a escribir sus cartas de dimisión, pero sin entregarlas aún a la dirección. Se trata, sobre todo, del personal técnico del taller «Amiyak-3», que funciona por turnos. En este taller trabajan unas 80 personas.
Antes de eso, uno de los turnos se negó por completo a entrar a trabajar en señal de protesta. Acudieron entonces el director general Ígar Babyr y el ingeniero principal Víktar Mijniévich. Como resultado, acordaron seguir trabajando.
El taller «Amiyak-4» está en medio de una reforma planeada, aunque esta debería haber empezado ya en verano. Algunos trabajadores consideran que la dirección retrasó el comienzo de la reforma por miedo a que los trabajadores no quisieran volver a poner el taller en marcha. Ahora el trabajo del «Amiyak-4» se desarrollan con bastante lentitud. Esto recuerda a una huelga italiana. Los trabajadores cumplen su tiempo de trabajo, no trabajan los fines de semana, y no hacen «horas extra» como lo hacían antes. Esto es legal.
«Los trabajadores están mostrándole a la dirección que no van a ganar dinero para ella», considera el presidente del sindicato independiente de «Grodna Azot», Andréi Janiévich.
¿Pueden sencillamente despedirlos? ¿Seguirá funcionando la fábrica?
«Amiyak-3» y «Amiyak-4» son dos de los talleres de factura más importantes de «Azot». Con ellos están relacionados, respectivamente, «Karbamid-3» y «Karbamid-4». Si verdaderamente despiden a los que han escrito las cartas de dimisión, la insuficiencia de plantilla no permitirá que «Amiyak-3» siga funcionando, ya que requiere vigilancia las 24 horas del día.
Como ha explicado Andréi Janiévich, hay muy pocos especialistas en este campo que estén preparados. Hacen falta seis meses de preparación para el trabajo.
En total, en la empresa trabajan unas 7 mil personas (sin contar la filial «Jimvalaknó», que pertenece al conglomerado). Alrededor de 1.500 trabajan por turnos.
«Estas son precisamente las personas que les ganan el dinero. Si se van, se paran los talleres. No se pueden sustituir. Esas son las personas que mueven la producción», explica Janiévich.
El sindicato independiente intentó convencer a los trabajadores de que no esсribieran cartas de dimisión.
«Porque lo más probable sería que las cosas salieran de forma un poco diferente. A algunos, los más activos, les firmarían la dimisión, y a los demás les dirían que siguieran trabajando hasta el final de sus contratos, y con eso se acabaría todo», dice el presidente del sindicato independiente.
¿Cómo de peligrosa es la reacción de los trabajadores?
Yury Razavy explica que los trabajadores no planean detener la producción de «Grodna Azot» de forma precipitada e insegura. Lo que más desean es detener la presión sobre sus compañeros y el director del taller, que les brinda su apoyo.
«No hay ninguna amenaza a la naturaleza ni a la maquinaria», asegura el líder del comité de huelga.
«Nosotros mismos vivimos en esta ciudad, tenemos parientes viviendo aquí. Piense si podemos arriesgar su seguridad. Por supuesto que no. Aquí trabajan especialistas capacitados. Estamos hablando únicamente de la detención pactada de la fábrica», dice otro de los trabajadores.
Yury Razavy está seguro de que si los trabajadores están verdaderamente motivados a protestar, esto llevará a la detención segura del trabajo del taller «Amiyak-3» en el plazo de un mes. Porque esa será la orden de la propia dirección.
¿Qué pasó en «Grodna Azot» tras las elecciones?
Los trabajadores de la gran empresa química «Grodna Azot» fueron de los primeros en anunciar su deseo de ponerse en huelga. Sus exigencias eran la dimisión de Aliaksandr Lukashenka, la celebración de nuevas elecciones, la liberación de los presos políticos y el fin de la violencia. Fueron visitados por la administración de la ciudad y luego por el nuevo presidente del comité ejecutivo regional Uladzímir Karanik.
La dirección de la empresa no permitió que los trabajadores hicieran huelga. El líder del comité de huelga, Yury Ravavy, se fue a Polonia por razones de seguridad. Por supuesto, algunos trabajadores dimitieron «de mutuo acuerdo».
Los trabajadores de «Grodna Azot» seguir participando en mítines callejeros. Un máximo de unas mil personas salieron al mismo tiempo en su representación al inicio de las protestas. La dirección les prohibió llevar a estas acciones el uniforme de trabajo de la empresa.
«Grodna Azot» no se puede detener inmediatamente debido a la complejidad de sus procesos tecnológicos. Es muy peligroso. Solo se puede detener paulatinamente, se tarda alrededor de un mes. Se tarda el mismo tiempo en que vuelva a ponerse en funcionamiento.
Este último mes se ha roto varias veces inesperadamente la maquinaria de los talleres «Amiyak-3» (que en verano pasó su reforma anual planeada) y «Amiyak-4». Además, varias veces se han colgado en «Azot» banderas blancas, rojas y blancas.
Esta publicación se ha preparado utilizando información de la agencia de noticias BelaPAN.